…“No podría
definir la alegría, el delirio, la fiebre, el invencible sentimiento de ser
amada
y amar a
quien me ama. No sé encontrar palabras que describan este fuego, este brillo,
este fulgor
que me ilumina, esta cegadora luz que me señala. Porque sería inútil tratar
de razonar
sobre este deseo incandescente, vivo, implacable, invencible; este deseo
arrasador,
que se ha convertido en dueño y señor de mi vida y de mi cuerpo”…,
Anónimo.
Quiero tenerte
delante de mí
mirarte desde
abajo
colocar mis
pies sobre los tuyos,
gigantes
perfectos;
besar tu
pecho… acariciar tu vientre
Dime qué es
lo que tú quieres que pueda…
Nos
excitaremos solo de vernos;
perderás el
equilibrio cuando mis ojos te señalen las estrellas,
revisaré tus
pezones con mi lengua
y les diré
con mi saliva, mis dientes y mis labios
cuánto te
deseo y cómo te amo.
Mirarte desde
abajo.
Besar todo tu
sexo y sus alrededores
como si fuera
la última y la primera vez;
empinarme luego
para lamernos el sabor de tu sexo en mi boca,
y frotar lo
mío contra tus muslos para que se amurallen nuestras piernas flojas.
Inclínate tú
ahora;
haz lo mismo
conmigo y
mírame.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada
¿Qué te ha parecido este texto? ¿Algún comentario?